Director 2007.10.10

Es posible que despierten una sorpresa los previos que escucharán durante los días de hoy mañana, anunciándoles que el jueves entrevistaremos a don Camilo Nogueira, ex Eurodiputado del Bloque Nacionalista Gallego; ya que teniendo en nuestra ciudad de La Coruña al Teniente –Alcalde don Kike Tello y sus correspondientes ediles, resulta que no hay forma y manera que contesten a nuestras llamadas telefónicas, a pesar de dejar el correspondiente mensaje en el contestador. Igual ha sucedido la semana pasada con nuestros representantes del Partido Socialista Obrero Español… Intento entender que están muy atareados con las obligaciones que han contraído al firmar este acuerdo contra natura… pero que, de momento, les garantiza una gobernabilidad por los siglos de los siglos, amén. O por lo menos eso es lo creen, después de poner en práctica el pacto del Tinell (O sea, todos contra el Partido Popular), puesto que si nunca el Partido Popular logra la mayoría absoluta, jamás de los jamases dejarán estos Partidos que la derecha alcance el Cetro del Poder… aunque entre ellos se lleven a matar. Pero mientras se sigan repartiendo la jugosa tarta que supone el Excelentísimo Ayuntamiento de La Coruña, donde están en juego una serie de infraestructuras multimillonarias: la tercera ronda, el plan Busquets, el puerto exterior, la estación Intermodal, el Metro Ligero o de superficie, etc… Estamos hablando de cifras que dan escalofríos, donde los seres humanos podemos caer en la tentación de una corrupción a nivel Marbella o a lo Felipe González o a la Catalana. Que conste que no estoy afirmando nada, sino reflexionando sobre el alcance de las debilidades humanas, cuando uno aspira a vivir como los grandes potentados, procediendo de familias humildes. Recordemos que hace muy poco y en una comida entre políticos de la izquierda se bebieron botellas de vino de cerca de 2500 euros/botella y se degustaron copas de whisky a 900 euros/copa. Y es que teniendo la posibilidad de poder hacerlo, sin que pase nada, ¿qué quieren que les diga?... que la carne es débil, como se nos decía en la infancia, y como por otro lado, y como dejó para la historia de España, una de nuestras Ministras, “como el dinero público no es de nadie”, pues el 3% catalán se puede convertir en el 13% o en el 23% o en el 33% de recargo en las obras... Todo depende de lo que el pueblo liso y llano percibimos a través de los escándalos que se dan al norte, sur, este ú oeste de nuestra amada España… todo depende, repito, a qué altura hemos colocado el listón de la conformidad.